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martes, 4 de agosto de 2015

La reforma del sistema de protección refleja un paso adelante en España

El Congreso de los Diputados ha aprobado definitivamente el proyecto de Ley de Protección de la Infancia. Hace pocos días, el proyecto de ley Orgánica que lo complementa, contaba con el visto bueno del Pleno del Senado, dando luz verde con sendas aprobaciones, a la efectiva reforma del sistema de protección de la infancia impulsada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Esta reforma está en consonancia con la Convención sobre los Derechos del Niño, así como con las recomendaciones que el Comité de Derechos del Niño hizo a España en el 2010.

La reforma vincula a una docena de normativas modificando, entre otros, el sistema de adopciones, la regulación de los centros de menores de edad con trastornos de conducta, el papel de los niños y niñas en los procedimientos judiciales o su protección frente a situaciones de violencia de género. Entre sus diversas mejoras, señalan cuestiones como una mejor regulación del principio del interés superior, avances igualmente con respecto al derecho del niño a ser escuchado, así como en relación al derecho de información y asistencia por parte de las Administraciones Públicas.

Pilares de la reforma

La reforma se fundamenta en estos cuatro pilares a saber:

1) priorización de las medidas familiares frente a las institucionales,
2) las estables frente a las temporales,
3) las consensuadas frente a las impuestas y
4) las nacionales frente a internacionales.

Estos cuatro pilares cogen fuerza al aplicarles el principio de interés superior del niño, principio vinculante a la hora de la respuesta que el Estado debe brindar.

Este nuevo modelo supone una reforma en profundidad del sistema de protección tanto en la entrada con la regulación de la guarda voluntaria como en las medidas de protección existentes: acogimiento familiar, residencial y adopción. La protección y prevención se convierte en principio de actuación. Las personas que han sido condenadas por delitos sexuales no podrán trabajar con niños y niñas y éstos serán considerados también víctimas de violencia de género.

La importancia de la prevención


Tan importante reforzar el sistema de protección de la infancia como impulsar medidas preventivas que eviten que los niños, niñas y adolescentes se inserten en el sistema de protección y puedan ser revictimizados en él mismo.

(basado en artículo publicado en sitio web Plataforma de Organizaciones de Infancia)

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